(Buenos Aires).- El tratamiento de oxigenación hiperbárica (TOHB) tiene múltiples beneficios comprobados, acelera los tiempos de cicatrización en distintos tipos de heridas, favorece la rehabilitación neurológica y reduce las complicaciones postquirúrgicas, entre otros. Pero gracias al desconocimiento del alcance del tratamiento, esta terapia ha sido relegada durante años, incluso en nuestro país aún hay datos que son ignorados y que pueden marcar grandes diferenciales en la salud pública.

Médicos argentinos de los principales hospitales del país y miembros de la Asociación Argentina de Medicina Hiperbárica e Investigación (AAMHEI) realizaron un trabajo de investigación en el que estudiaron 102 trabajos científicos sobre TOHB en distintos países -divididos por patologías- y analizaron los costos y/o tiempos de cicatrización, la disminución de las complicaciones quirúrgicas y neurológicas y la optimización de los tratamientos farmacológicos.

El principal efecto del tratamiento de oxigenación hiperbárica es la generación de hiperoxia, que produce efectos fisiológicos terapéuticos como vasoconstricción, disminución de la inflamación y dolor, incremento de la inmunidad celular y acción bactericida.  

Según el estudio, el TOHB es ampliamente utilizado en el mundo en la cicatrización de heridas y las úlceras diabéticas. La mayoría de los trabajos hacen hincapié en su eficacia terapéutica y en que acelera la curación en un período de seis meses, y hasta en algunos pacientes las amputaciones mayores se limitan a amputaciones menores.

En los casos de complicaciones quirúrgicas, el TOHB constituye un potente activador de la terapia convencional, ya que aumenta la actividad bactericida de antibióticos, hace más efectivo el tratamiento y disminuye las probabilidades de resistencia antimicrobiana. Se ha demostrado que el TOHB aumenta la efectividad del tratamiento antimicrobiano en mediastinitis, osteomielitis e infecciones provocadas en el quirófano.

En cuanto a su potenciación de farmacoterapia y rehabilitación neurológica, la terapia de oxígeno hiperbárico provoca un efecto analgésico directo, demostrado en enfermedades reumatológicas, oncológicas y síndromes neurosensitivos. Además, optimiza la recuperación del déficit neurológico del paciente con accidente cerebrovascular, isquemias y traumas cerebrales.

Reducir los costos de salud es posible 

Uno de los puntos más sensibles sobre este tema son los costos sanitarios. En nuestro país, a raíz de la crisis económica del año 2001, las diversas aplicaciones del TOHB aprobadas por el plan médico obligatorio fueron restringidas sólo a gangrena gaseosa, enfermedad por descompresión y embolia gaseosa o aérea. Hoy se mantiene igual.

Esta fue una de las razones por las que los médicos argentinos decidieron investigar qué pruebas hay en la contribución del TOHB para la disminución de costos en el área de salud y la reducción en los tiempos de recuperación.

De acuerdo con los resultados expuestos por los diferentes trabajos científicos y las tasas de recuperación reportadas en las distintas patologías y procedimientos quirúrgicos, se afirma que el tratamiento de oxigenación hiperbárica podría resultar altamente beneficioso en la relación costo-efectividad. Esta terapia logra una menor incidencia de complicaciones postquirúrgicas y una mejoría sustancial en los tiempos de recuperación, incluso en heridas refractarias.

Sin embargo, toda la bibliografía relacionada con el costo-efectividad de la tecnología se realiza para determinadas poblaciones. Se debe analizar la aplicación en el contexto de cada población en particular, con los recursos de salud necesarios, los gastos médicos, de medicamentos, coberturas y sistema de atención específico que puedan definir la utilidad de este tratamiento en cada país para determinadas indicaciones.  Será necesario un análisis de factores específicos de cada contexto, es decir, la variabilidad en la relación de costo-efectividad entre distintas jurisdicciones e instituciones, para evaluar la tecnología sanitaria en cada sistema de salud poblacional.

La inclusión del TOHB en el esquema terapéutico, en casos bien seleccionados y particulares, puede ser un gran aliado para la salud del paciente, la comunidad medica y los programas nacionales de salud.

Para leer la investigación completa : http://www.revistasam.com.ar/index.php/RAM/article/view/343

Autores del Trabajo de Investigación Publicado en la Revista Argentina de Medicina : Dra. Mónica del Carmen Jorge (Médica dermatóloga, especialista en Salud Pública, a cargo de la Clínica de Heridas, Hospital Dr. J.M. Ramos Mejía del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires; directora de la Comisión de heridas y pie diabético de AAMHEI), Dra. Laura Ríos (Médica reumatóloga, especialista en dolor, Hospital Dr. J.M. Ramos Mejía), Dr. Oscar Merbilhaa (Médico cirujano plástico, cirugía plástica y quemados, Hospital de Quemados A.U. Illa), Mercedes Portas (Médica cirujana plástica, jefa del Departamento de cirugía plástica y quemados, Hospital de Quemados A.U. Illa, Directora de la Comisión de cirugía plástica y quemados, AAMHEI).

 Acerca de AAMHEI

La AAMHEI (Asociación Argentina de Medicina Hiperbárica e Investigación) es una organización profesional, científica, sin fines de lucro que promueve el avance de la investigación y la tecnología de la medicina hiperbárica. Está integrada por profesionales de diferentes especialidades médicas, nacionales e internacionales, con conocimiento en medicina hiperbárica y con la convicción de poder contribuir a mejorar la salud del paciente restaurando su equilibrio biológico. Más información: www.aamhei.com