(Madrid).- La consultora PwC, junto con la Federación Europea de Asociaciones de la Industria Farmacéutica (Efpia), ha elaborado el informe Los sistemas sanitarios después de la Covid-19. Una visión sobre los sistemas de salud europeas, con el objetivo de mejorar la calidad y funcionamiento de los sistemas de salud para dar respuestas eficientes a futuras emergencias sanitarias.

El documento, motivado por la pandemia de Covid-19, se ha realizado a través de entrevistas y foros de discusión con agentes del sector y ha identificado cuatro aspectos para garantizar el futuro de las estructuras sanitarias: prevención y atención temprana, planificación del futuro, digitalización y centrarse en las personas y resultados.

Respecto a la prevención, el informe revela que los sistemas sanitarios siguen centrados en el tratamiento, dejando de lado la actuación precoz. La transformación en este ámbito debe darse a través de la colaboración y trabajo conjunto de las partes interesadas para garantizar que la innovación llegue lo antes posible a los pacientes.

Expertos de PwC añaden que en el futuro, los modelos de atención sanitaria deben construirse alrededor de los pacientes, especialmente crónicos, lo que requerirá no solo una mejor integración de diferentes disciplinas y servicios, sino también la inclusión de modelos de pago innovadores para asumir vías de atención más eficientes.

Por otro lado, destacan la importancia de la planificación: Monitorizar los comportamientos epidemiológicos, estudiar factores de riesgo, considerar el contexto epidemiológico y el llamado horizon scanning (conocer las tecnologías sanitarias que están por venir) permitirán tomar decisiones presupuestarias de futuro con la mirada puesta en mejorar los resultados en salud de la población.

La investigación clínica es otro aspecto fundamental que debe ser considerada una prioridad de salud pública y que se ha visto afectado con la pandemia de Covid-19, por lo que se hace necesario que algunos procesos de los ensayos clínicos se puedan ejecutar en remoto.

En esta línea, el estudio sostiene que Europa necesita invertir en la digitalización e impulsar el Espacio Europeo de Datos de Salud: Es el momento de revisar y perfeccionar los sistemas para respaldar los servicios apoyados en la tecnología.

Por último, la formación de los profesionales sanitarios y los pacientes es esencial para mejorar la atención y toma de decisiones, especialmente en los grupos más vulnerables. Desde Efpia, subrayan que no solo deberíamos reconstruir nuestras economías y hacer que nuestras sociedades se recuperen, sino que también deberíamos aprovechar la oportunidad para implementar una ambiciosa agenda de reformas para los sistemas de salud europeos. Volver al statu quo anterior a la pandemia no sería una opción adecuada.

Además, la inversión en el sector sanitario sería un instrumento eficaz para redistribuir la renta y acercar la igualdad real de oportunidades, pues proporcionaría notables incrementos en el PIB del país, según sugiere un informe de Analistas Financieros Internacionales (Afi).

La directora general de Efpia, Nathalie Moll, subraya el papel de la industria farmacéutica: Podemos desempeñar un papel importante en la reconstrucción y mejora de nuestros sistemas de salud para abordar mejor los desafíos del mañana. A través de asociaciones más estrechas con otros actores del sector sanitario, podemos prevenir de manera más efectiva la enfermedad, mejorar el manejo de patologías a través de datos y tecnología y desarrollar con éxito innovaciones que pueden mejorar la salud de los pacientes.

Fuente: ConSalud