(Madrid).- Emma Walmsley, CEO de compañía farmacéutica GSK, es la mujer más poderosa de la sanidad mundial. Así se desprende del ranking de 'Las 50 mujeres más poderosas' publicado por la revista Fortune. La CEO de GSK se sitúa en el segundo puesto de esta clasificación global, liderada por Ana Botín, presidenta del Banco Santander.

También se cuela en este ranking la presidenta de Novartis Oncology, Susanne Schaffert, que ocupa el puesto 29.

Trayectorias

Walmsley inició su carrera profesional en L'Oreal, donde trabajó durante 17 años. En 2010, se incorporó a GSK como presidenta de Consumer Healthcare Europe, pasando más tarde por el puesto de directora ejecutiva de Consumer Healthcare. En 2017 asumió el cargo de CEO de la compañía, convirtiéndose en la primera mujer en dirigir una big pharma.

Cuando Walmsley cogió las riendas de la compañía inició una nueva estrategia comercial en la que destaca la compra de la biotecnológica Tesaro por 5.000 millones de dólares.

Por su parte, Susanne Schaffert, comenzó su carrera en Novartis hace más de 20 años durante los que ha ocupado puestos como directora de relaciones con inversores, gerente de Novartis Oncology Europa del Norte y Central y de Alemania, entre otros.

Fue nombrada presidenta de Novartis Oncology en enero de este año. Desde entonces, Schaffert se ha centrado en ampliar el acceso a Kymriah, la primera terapia CART de la industria farmacéutica financiada por el Sistema Nacional de Salud (SNS).

Estos esfuerzos se han traducido en un incremento de las ventas, alcanzando los 6.900 millones de dólares en la primera mitad de 2019, acaparando esta división el 40 por ciento de los ingresos generales de la compañía.

Fuente: Redacción Médica