(MAdrid).-  Un minuto de trabajo de un cirujano supone un desembolso medio de 8 euros, según el estudio Understanding Costs of Care in the Operating Room.

En total, una intervención puede llegar a costar entre 20 y 30 euros, una cifra que se divide entre los costes directos, que suelen representar entre 17 y 18 euros, y los indirectos, que acostumbran a ser más bajos y se quedan entre 11 y 13 euros.

Los suministros necesarios para la operación representan entre 2 y 3 euros, el salario del cirujano y del equipo que lo asiste puede ser de unos 8 euros por minuto, los beneficios suelen alcanzar los 3 euros y otros conceptos derivados de la intervención suponen la menor parte y pueden sumar a la factura unos 2 euros, ha asegurado David Geffen, autor principal del estudio, en referencia a los costes que estiman que cuesta cada minuto de una operación rutinaria.

Asimismo, tampoco se deben descartar los gastos indirectos que suponen para el paciente, el seguro o el sistema sanitario que está pagando por la operación, que pueden ser de entre 11 y 13 euros. Se debe tener en cuenta que detrás hay un servicio de lavandería y limpieza que pone a punto el quirófano, un equipo de seguridad y más allá, también se contabilizan los costes del párking.

El salario del cirujano es la partida más alta de la operación, ya que está alrededor de los 8 euros por minuto, y a él le siguen los beneficios que el hospital recibe por prestar el espacio para la realización de la intervención, que alcanzan una media de 3 euros por minuto, ha afirmado Geffen.

No todas las operaciones son iguales

El estudio se ha basado en una media realizada en base a un número de operaciones de todo tipo. No tienen los mismos costes las operaciones pequeñas o las que conllevan un menor riesgo que las cirugías en las que los pacientes tienen una dolencia mucho mayor o la zona afectada tiene una mayor probabilidad de sufrir algún tipo de daño durante la intervención.

Fuente: Redacción Médica