(Buenos Aires).- La obesidad se ha convertido en una epidemia en bastantes naciones del mundo, por culpa en gran parte de las dietas hipercalóricas cargadas de grasa y azúcar. El estilo de vida sedentario que cada vez se sigue más en esas naciones agrava el problema.

Pero nuestros genes también desempeñan un papel importante en cuanto a probabilidades de volvernos obesos, ya que regulan el almacenamiento de grasa y afectan a la forma en que nuestro cuerpo quema los alimentos como combustible. Así que si podemos identificar los genes que convierten el exceso de comida en grasa, podríamos intentar desactivarlos con fármacos y desvincular el exceso de comida de la obesidad.

A lo largo de los años, se han identificado cientos de genes asociados a la obesidad, lo que significa que esos genes y su actividad son más frecuentes en las personas obesas que en las de peso saludable, o bien que son menos frecuentes en la gente obesa que en la de peso normal. El reto consiste en determinar qué genes desempeñan un papel causal al promover el aumento del peso o al ayudar a evitarlo, ya que ello requiere una cantidad ingente de experimentos.

A fin de superar este obstáculo, el equipo de Eyleen O'Rourke, de la Universidad de Virginia en Estados Unidos, ha desarrollado un sistema automatizado para probar simultáneamente cientos de genes en busca de un papel causal en la obesidad.

Y en su primera ronda de experimentos ya ha tenido éxito, descubriendo 14 genes que causan obesidad.

O'Rourke y sus colegas creen que su nueva técnica acelerará el desarrollo de tratamientos para combatir la obesidad. Los resultados de la investigación se han hecho públicos a través de la revista académica PLOS Genetics. La referencia del trabajo es la siguiente: Ke W, Reed JN, Yang C, Higgason N, Rayyan L, Wählby C, et al. (2021) Genes in human obesity loci are causal obesity genes in C. elegans. PLoS Genet 17(9): e1009736.

Fuente: NCYT de Amazings