(Bogotá).-Año y medio ha pasado desde la suspensión del laboratorio de Coldeportes por la Agencia Mundial Antidopaje (WADA) por dos análisis fallidos, un par de muestras doble ciegas que generalmente envía la entidad para garantizar la calidad de los 32 laboratorios a escala mundial. Dos resultados dieron negativo, cuando eran positivos por las sustancias Modafinil y Metilfenidato.
En agosto, tras una visita en la que un equipo técnico auditor de la WADA se dedicó a evaluar las condiciones físicas, técnicas y operacionales. "Se encontraron 38 ‘No Conformidades’ y 56 recomendaciones, que nos ayudarían a solventar dichos hallazgos. Fue en ese momento que se iniciaron los estudios y las investigaciones para realizar el Plan de Acción que en inicios del 2018 le permitió al Laboratorio Control al Dopaje de Colombia darle solución a 26 de las 38 ‘No Conformidades’, es decir que tan solo 12 de los hallazgos, identificados siete meses atrás, se encontraban en proceso de solución", precisó Paola Cárdenas, directora científica.
Sin embargo, no fue suficiente. El 25 de octubre el director de Coldeportes, Ernesto Lucena, viajó a Montreal (Canadá), para reunirse con el equipo directivo de la WADA, conformado por Olivier Rabin, director ejecutivo; Osquel Barros, director adjunto de Ciencia, y Oliver Nigga, director general. Las noticias no fueron las mejores, pues se determinó revocar de manera indefinida la acreditación del Laboratorio de Control al Dopaje de Colombia.
Recuperar la certificación es uno de los objetivos primordiales de Coldeportes. Ernesto Lucena especificó que la entidad se rige bajo tres principios básicos: legalidad, emprendimiento y equidad. “Del primero, una de las aristas es el control al dopaje. La reunión en Canadá fue positiva. Los oficiales de la WADA plantearon los pasos a seguir para lograr la recertificación del laboratorio”. Así mismo, el director señaló que no se apelará la decisión de suspender la acreditación del centro de control al dopaje, “no obstante seguiremos el plan de acción para recertificarlo por medio del mecanismo de fast track. Este es un compromiso de país”.
El fast track, según explicó Orlando Reyes, coordinador nacional antidopaje, es la vía rápida por la cual se puede reestablecer la acreditación. “Es un procedimiento que sugiere la WADA. Generalmente, el proceso para certificar un nuevo laboratorio dura entre cinco y seis años. Pero para que los que ya están establecidos y fueron suspendidos indeterminadamente no tengan que hacer ese proceso, la agencia abre esta vía para que en un año puedan volver a funcionar”.
De esta manera Coldeportes, en cabeza de Ernesto Lucena y Paola Cárdenas, se enfocará en un plan de acción que busca trabajar en cuatro frentes: financiero, profesional, tecnológico y operacional. Cada uno de ellos cuenta con unas acciones específicas que le brindarán las herramientas necesarias para trabajar bajo los lineamientos requeridos por la Agencia Mundial Antidopaje, pues también se pretende proyectarlo como centro de investigación nacional e internacional.
Por consiguiente, se destinarán alrededor de $6.000 millones para ejecutar ese plan de acción. El 16 % de la inversión será para el frente profesional. En otras palabras, que el personal pueda asistir a entrenamientos, conferencias y encuentros de networking que les permitirá certificarse en técnicas y procedimientos para permanecer actualizados. El 46 % del dinero se invertirá en actualización tecnológica. Se iniciará el proceso de compra de los nuevos instrumentos requeridos por la WADA para el análisis de muestras de sangre de pasaporte biológico: Sysmex XN. Lo anterior le permitirá que en un tiempo máximo de cuatro meses el laboratorio de Coldeportes reciba el aval de la Agencia Mundial Antidopaje para la recepción y emisión de resultados de pasaporte biológico.
Otro 20 % del presupuesto se irá para el frente operacional. Con ello se realizarán las compras de elementos reactivos, estándares, consumibles y materiales necesarios para el funcionamiento. Mientras que el 18 % restante será para sostenimiento profesional. “El plan de acción para los próximos doce meses está dividido en ocho etapas, la búsqueda de soporte financiero; la actualización técnica del personal, que nos garantizará tener científicos certificados; entrenamientos específicos, que consta de asistencia a seminarios, charlas, visitas a laboratorios internacionales, Networking y el coaching con laboratorio de Italia y Río de Janeiro; el fortalecimiento del Sistema de Gestión de Calidad; la adquisición de materiales de referencia; la validación de métodos de confirmación; la infraestructura del laboratorio y la actualización del equipo tecnológico.”, resaltó Paola Cárdenas.
Que el laboratorio se encuentre sin la acreditación no quiere decir que no se sigan tomando muestras de dopaje. El médico Reyes sigue al frente, recolectando análisis que generalmente se están enviando a Salt Lake City. Por el año próximo este seguirá siendo el procedimiento, a la espera de que Coldeportes actualice el centro de control al dopaje, que en febrero cumplirá dos años de suspensión.
Fuente: El Espectador
