(Wisconsin).- Aprovechar la energía del cuerpo humano para acelerar el proceso de curación que brindan los ventajes. Ese ha sido el logro de un equipo de investigadores de la Universidad de Wisconsin-Madison (Estados Unidos), un grupo que se ha servido de los movimientos del cuerpo para generar impulsos eléctricos y, así, ayudar a que las heridas sanen más rápido.

Su desarrollo podría tener grandes implicaciones para el cuidado de las heridas crónicas, ha señalado el investigador principal, Xudong Wang, quien ha anunciado que los científicos ya han completado todos los procesos investigativos en modelos animales (ratas).

Así, los resultados evidenciaron que las heridas tratadas con este tipo de estimulación eléctrica sanaron en apenas tres días, frente a las dos semanas de curación tradicional. Los resultados de este trabajo fueron publicados en la revista científica ACS Nano.

Estas conclusiones fueron una gran sorpresa para nosotros, ha subrayado Wang, profesor asociado de Ciencia de los Materiales e Ingeniería en el centro académico americano, añadiendo que el equipo tiene esperanzas de comenzar los ensayos en seres humanos dentro de tres años.

Atendiendo a detalles concretos, el dispositivo cuenta con un nanogenerador, que convierte los movimientos de la piel, como los causados por la respiración, en impulsos eléctricos. Así mismo, estos mecanismos están unidos a una banda que se dispondría alrededor del torso del paciente.

Los campos eléctricos pueden facilitar la alineación y la proliferación de las células de la piel de los fibroblastos, que desempeñan un papel fundamental para la curación de la piel, ha concluido el docente e investigador de la Universidad de Wisconsin-Madison.

Fuente: ConSalud