(San Pablo).- Científicos brasileños anunciaron el desarrollo de una nueva prueba para el diagnóstico de la enfermedad de Hansen (lepra), que tiene una prevalencia mundial de 22,9 personas por cada millón de habitantes y es considerada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como una enfermedad tropical desatendida. India, Brasil e Indonesia concentran el 79 por ciento de los casos mundiales.

El nuevo método propuesto para la detección del bacilo Mycobacterium leprae, causante de la enfermedad, es el mismo que se utiliza en una de las pruebas diagnósticas de COVID-19, la PCR, siglas en inglés de Reacción en Cadena de la Polimerasa. Mediante una reacción enzimática esta prueba amplifica (aumenta) la cantidad de ADN de las bacterias, lo que permite detectarlo incluso en pequeñas cantidades.

El Kit NAT-HANS ya fue registrado ante la Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria (ANVISA), encargada de regular y aprobar los productos y servicios sujetos a vigilancia sanitaria, para su posterior comercialización y producción en Brasil.

La prueba está disponible, pero estamos trabajando para que la apruebe la Comisión Nacional de Incorporación de Tecnologías, instancia del Ministerio de Salud (MS) que evalúa la incorporación de nuevas tecnologías, tras lo cual la MS podrá adquirirla y distribuirla en el Sistema Único de Salud, confirmó Milton Ozório Moraes, líder del proyecto y jefe del Laboratorio de la Enfermedad de Hansen del Instituto Oswaldo Cruz de la Fundación Oswaldo Cruz. Estará disponible gratuitamente para los pacientes, precisó.

Carmelita Coriolano, coordinadora general de Vigilancia de Enfermedades en Eliminación del Ministerio de Salud, señala que se ha hecho mucho para combatir la enfermedad, especialmente en el campo de la investigación básica o aplicada, con el fin de llegar a su diagnóstico en laboratorio, debido a que la enfermedad de Hansen aún se diagnostica solo mediante la identificación de signos y síntomas clínicos. Sabemos que un diagnóstico basado únicamente en la observación clínica puede conducir a errores, ya que esta enfermedad puede presentar signos y síntomas muy similares a otras dermatosis, dijo a SciDev.Net.

Marcelo Távora Mira, profesor de la Pontificia Universidad Católica de Paraná, también habló con SciDev.Net sobre la dificultad actual de diagnóstico: El diagnóstico de la enfermedad de Hansen es esencialmente clínico y muy complejo, por lo que se requieren dermatólogos especializados en ella muy bien capacitados, como los que trabajan en los centros de referencia. Según él, con la descentralización de la atención a la enfermedad, se los ha alejado de la mayoría de pacientes, pues generalmente no están presentes en los equipos de atención primaria. Por lo tanto, el diagnóstico tardío sigue siendo común, lo que contribuye al mantenimiento de la transmisión activa de la enfermedad, lamentó.

Además de simular otras enfermedades reumatológicas y dermatológicas, algunos casos de la enfermedad de Hansen evolucionan con escasos síntomas y signos, lo que dificulta el diagnóstico precoz. Y debido a que es una enfermedad desatendida, hay poca inversión en herramientas tecnológicas. En este contexto de complejidad para el diagnóstico, la funcionaria del Ministerio de Salud manifestó que una prueba diagnóstica contribuirá a la lucha contra la enfermedad, ayudando a su precisión diagnóstica y atención, considerando que una definición más precisa y temprana del diagnóstico interrumpirá la cadena de transmisión y permitirá lograr su eliminación como problema de salud pública.

Para la dermatóloga Maria Leide Oliveira, profesora de la Universidad Federal de Río de Janeiro, la nueva prueba es un gran apoyo para la sospecha clínica y el diagnóstico diferencial con otras dermatosis. Además de simular otras enfermedades reumatológicas y dermatológicas, algunos casos de la enfermedad de Hansen evolucionan con escasos síntomas y signos, lo que dificulta el diagnóstico precoz. Y debido a que es una enfermedad desatendida, hay poca inversión en herramientas tecnológicas, comentó.

No obstante, Moraes afirmó que la nueva prueba aún enfrenta algunos desafíos. Lo ideal sería un diagnóstico estándar de oro, que pudiera identificar a todos los pacientes portadores de la enfermedad. Actualmente, esto no es posible debido a una serie de factores, como la “ventana” para la detección. Además, las formas con pocos bacilos (paucibacilares) son un reto particular, ya que la prueba convencional (llamada baciloscopía) —que detecta bacterias mediante tinción en portaobjetos— no detecta ningún paciente con esas formas. La nueva prueba NAT-HANS detecta el 75 por ciento de estos casos, indicó.

En otras palabras, la nueva prueba permite un avance importante en el diagnóstico, pero algunos casos de la enfermedad aún permanecerán sin identificar.

En este sentido, Mira recordó que el diagnóstico de esta enfermedad es clínico y complejo. Por lo tanto, pruebas de apoyo al diagnóstico como las basadas en la detección molecular del ADN de la Mycobacterium leprae son herramientas de ayuda potencialmente importantes, por lo que los esfuerzos para su desarrollo, validación e implementación en el sistema de salud pública son muy deseables. Pero cabe mencionar que estas pruebas apoyan el diagnóstico y deben ser interpretadas como tales, siempre por especialistas en la materia, advirtió.

La enfermedad de Hansen es curable mediante terapia con múltiples fármacos. Si no se trata, puede causar daños progresivos y permanentes en la piel, los nervios, las extremidades y los ojos.

Fuente: Sci Dev Net