(Buenos Aires).- En el Día Mundial del ACV, el Dr. Juan Martín Cardozo Oliver,
Coordinador de Neurología del Sanatorio Finochietto, explicó qué tener en cuenta a la hora de prevenir un ACV. El ACV (ACCIDENTE CEREBRO VASCULAR) es  una interrupción de la circulación cerebral de aparición abrupta (aguda), que provoca un daño a determinada parte del SISTEMA NERVIOSO CENTRAL -SNC- (cerebro, cerebelo, tronco cerebral y médula espinal), generando una pérdida de funciones neurológicas que pueden ser irreparables, cambiando en un instante la vida de quien lo padece. 

Hay varios tipos de ACV. Los más frecuentes son los ACV ISQUÉMICOS, en los cuales se tapan arterias del SNC, por placas de colesterol en las paredes de las arterias o por coágulos que viajan por la sangre. También existen los ACV HEMORRAGICOS, en los cuales las arterias o venas se rompen y la sangre dentro del cráneo comprime al SNC provocando un daño muchas veces fatal.

Según el Dr. Cardozo Oliver, la gran mayoría de los ACV se producen por enfermedades del aparato cardiovascular, al igual que gran parte de las enfermedades cardíacas, como hipertensión, diabetes, tabaquismo, alcoholismo, obesidad, apneas del sueño entre otras, que son los considerados FACTORES DE RIESGO VASCULAR 

Los síntomas

Los síntomas del inicio de un ACV no suelen pasar inadvertidos y se presentan rápidamente. Un cuadro brusco de debilidad o incoordinación de la mitad del cuerpo, visión doble, ceguera, limitación de la visión, falla en la emisión o comprensión del lenguaje, pueden corresponder a un ACV, especialmente en personas con antecedentes de FACTORES DE RIESGO VASCULAR.  

Una consulta rápida a un centro de complejidad puede permitir que el ACV se revierta.

El especialista agregó que en la actualidad, dados los avances científicos de las últimas décadas, se dispone de un tratamiento para revertir ACV ISQUÉMICOS en los casos en que se consulta en las primeras 3 o 4 horas de instalados, ya que se puede disolver el coágulo o trombo que genera la obstrucción de la circulación.

Según el doctor, si la reversión del ACV no fuera posible, siendo que los ACV suelen repetirse, después de haberse producido el mismo, el paciente deberá controlar sus FACTORES DE RIESGO VASCULAR con medidas de PREVENCIÓN SECUNDARIA, a fin de evitar su repetición.

En algunos casos, la consecuencia de un ACV, por ejemplo, la hemiplejia, requerirá de una rehabilitación de las funciones alteradas.

La PREVENCIÓN PRIMARIA, es decir, el control preventivo de los FACTORES DE RIESGO VASCULAR es la medida que puede disminuir la aparición de un ACV. En caso de aparición súbita de síntomas sugestivos de ACV, se recomienda una consulta rápida a un centro de complejidad, donde el paciente tendrá mayores oportunidades de revertirlo. Y agregó, hay que recordar que el ACV es más frecuente en varones y después de los 55 años. 

Acerca de Sanatorio Finochietto

En el año 2011 la Obra Social ASE comenzó la construcción del Sanatorio Finochietto. Un centro asistencial innovador con tecnología de vanguardia, basado en un nuevo paradigma de salud centrado en la atención integral del paciente y su familia. El Sanatorio fue inspirado por la figura del prestigioso Doctor Enrique Finochietto, de quien se rescata su legado y su honorabilidad al servicio de la medicina. Su arquitectura y tecnología eco-sustentable, basada en el uso eficiente y responsable de los recursos y la energía, lo convirtió en el primer Sanatorio bio-eco inteligente de Latinoamérica.

Fuente: Ginkgo Comunicación