(Buenos Aires).- Hace no muchos años la promesa de lograr una conectividad de ultra velocidad que hiciera posible plataformas de realidad virtual envolventes parecía inalcanzable. Hoy esa tecnología se llama 5G y está a la vuelta de la esquina. La velocidad de las redes 5G es sorprendente: funcionará entre 10 y 100 veces más rápido que la tecnología actual y uno de los mercados a los que más ayudará a expandirse es al de la telemedicina.

Este año unas 20 operadoras de telefonía móvil alrededor del mundo planean empezar a presentar servicios 5G, aunque no será hasta el año que viene que la infraestructura comience a desplegarse. Los países más avanzados son Estados Unidos, China, Japón y Corea del Sur. Para 2022 se espera que el 5G se adopte masivamente a nivel global.

Algunos de los aspectos disruptivos de la tecnología 5G son su gran ancho de banda y su baja latencia. La primera tiene que ver tanto con la velocidad como con la capacidad para conectarse a muchos dispositivos al mismo tiempo, un elemento clave para los dispositivos IoT (Internet of Things). Para comparar, mientras que las redes 4G permiten apenas unos 4 mil dispositivos por kilómetro cuadrado, las 5G permiten un millón. Esto abre la puerta al tratamiento remoto de pacientes, tanto aquellos que estén internados como quienes hayan recibido un tratamiento ambulatorio.

En cuanto a la latencia, esta se trata de la velocidad de respuesta. Por ejemplo, desde que un usuario toca el botón “buscar” en Google hasta que del otro lado el pedido es recibido y se da una respuesta en una red 4G puede tomar alrededor de 50 milisegundos. En una con tecnología 5G tomaría solo un milisegundo. Esto será clave para el avance de la telemedicina, especialmente en lo que respecta a la cirugía a distancia.

En el caso de Llamando al Doctor, sin ir más lejos, esta tecnología permitirá que las llamadas en alta definición puedan tomarse en cualquier lado sin preocuparse por los costos o interrupciones por el lento funcionamiento de las redes. También lo que el 5G podría inaugurar es la incorporación de dispositivos IoT en el monitoreo de signos vitales u otros aspectos médicos en tiempo real.

Algoritmos que trabajen más rápido estudiando diferentes procesos a través de internet, conexiones que les permitan a los pacientes conectarse de manera inmediata con sus médicos, e incluso el monitoreo constante de la salud a través de internet sin ningún tipo de delay son solo algunos de los aspectos que mejorarán gracias a esta tecnología.

Estamos en una época única en lo que respecta al avance de la salud gracias a la mayor disponibilidad de conexiones rápidas y económicas. Aún no sabemos cuándo esta tecnología estará disponible en Argentina, pero desde ahora debemos empezar a proponer aplicaciones y soluciones que aprovechen sus virtudes. Cuando el 5G esté disponible ya será demasiado tarde para pensar el futuro de la medicina, y es por ello que nos toca inventarlo ya mismo.

Ingrid Briggiler in Llamando al Doctor

Fuente: Medium