(Rosario).-  Pese a que el 2020 llegó a su final, la pandemia persiste. Desde Laboratorios TURNER realizaron un balance sobre cómo se trabajó a lo largo de este año, cuáles fueron los desafíos que tuvieron que enfrentar y qué visión tienen de cara al futuro, tras haber enfrentado cara a cara al Covid-19.

Sin dudas que el 2020 quedará en la historia mundial como uno de los años más complejos y fatídicos, pero también como uno de los períodos en los que mayores cambios tecnológicos hubo. Laboratorios TURNER tuvo un rol preponderante para colaborar en evitar el colapso de la Salud Pública local.

En diálogo en exclusiva con La Capital , Santiago Turner, Gerente Administrativo de Laboratorios TURNER, señaló cómo tuvieron que readaptarse a la nueva normalidad, qué inversiones en tecnología realizaron para satisfacer una demanda inusitada y qué visión tienen de cara al futuro entendiendo que la pandemia continuará pese al arribo de la vacuna.

¿Cómo influyó la pandemia en la dinámica laboral de Laboratorios TURNER?
Influyó mucho, porque antes contábamos con pacientes que asistían a nuestras sedes sin turno, con atención presencial, con horarios específicos. La vieja normalidad, por decirlo de algún modo, se vio muy modificada para poder sostener el nuevo contexto pandémico.

La dinámica laboral se basó siempre en evitar el mayor contacto posible, dentro de lo que la tecnología nos permitió hasta lo humanamente posible, porque hay situaciones particulares que demandan de un acercamiento mucho más físico que digital.

Teniendo en cuenta lo extensa que fue la cuarentena, ¿cómo evalúan el comportamiento social?
Yo creo que fue todo gestado en base a la incertidumbre y por eso se tomó esta decisión de mantener una cuarentena extensa. Sin embargo, el problema que detectamos, es que la gente se empezó a agotar de esta situación y comenzó a dejar de escuchar.

Por ejemplo, en los primeros meses, es decir marzo, abril y junio, la gente estaba muy atenta a los comunicados de los funcionarios por los medios, pero, tras más de 90 días de confinamiento, se comenzó a detectar el cansancio, lo que repercutió en un aumento de casos de Covid-19, lo que provocó, a su vez, que las personas empiecen a dudar de la cuarentena.

Bajo esta circunstancia, durante septiembre y octubre, tuvimos un aumento importante de casos. Por eso, también parte de la población activa también se contagió y, quizás hoy, haya menor circulación del virus. Pero está claro que la gente se agotó y dejó de escuchar.

En la articulación entre lo público y lo privado, ¿están satisfechos con lo trabajado en conjunto?
Sí, totalmente. Al principio lo manejo solamente el ámbito público porque no se sabía exactamente cómo iba a ser el comportamiento social respecto a la pandemia. Cuando se agravó el tema de los contagios, se permitió la intervención del privado para acompañar y no saturar lo público.

Esto se hizo muy bien y ayudó mucho, sobre todo entre septiembre y octubre, para satisfacer la demanda de hisopados, de consultas, entre otras dudas que iban surgiendo. Me parece que sin la intervención del privado no hubiera sido posible contener la alta demanda.

En conclusión, creemos que funcionó muy bien la articulación, sobre todo en cuanto a la comunicación y el acompañamiento a los pacientes. Además, hay que tener en cuenta que este buen manejo habilitó que el ámbito público se pueda ir preparando. De hecho, hoy en día, se encuentra mucho más organizado y con más capacidad de respuesta.

¿Qué opinión les merece las distintas vacunas que están saliendo a la luz?
Estamos con incertidumbre. No somos palabra autorizada sobre la vacuna. Damos una opinión con cualquier ciudadano. Estamos viendo todavía qué tan eficientes son. También se está hablando de una nueva cepa en Inglaterra y no se sabe el efecto que podrían tener las vacunas.

La realidad es que las estamos esperando y creemos que es necesaria la vacunación para cortar los contagios y proteger a los de mayor riesgo. Todavía hay mucha desinformación y mucha urgencia, entonces no se puede detectar bien de qué se trata.

¿Piensan que el próximo año será similar a este o con la vacuna mermará la demanda?
La verdad que hace pocas semanas pensábamos que iba a bajar con la vacuna. Hoy tenemos más dudas porque hay una nueva cepa. Hay que ver cómo evoluciona e investigarla. No podemos ignorar nada y estar preparados frente a lo que se viene al 2021.

Pienso que volveremos a una normalidad, con un aprendizaje. Me parece que vamos a ser más cuidados con la higiene, con lo que se comparte, con lo que tocamos. Tener mucho respeto por los demás, porque a veces se ven reuniones masivas donde nadie corre riesgo quizás, pero cuando nos juntamos con mayores sí se pueden ver afectados. Creo que todos somos un poquito más conscientes de que esto puede volver a suceder. Me parece muy acertado el concepto de una ‘nueva normalidad’.

¿Hay proyectos de cara al 2021?, ¿cuáles?
Sí, tenemos muchos proyectos. Justamente la pandemia nos abrió puertas a lo digital. Entonces, si bien pensamos que estuvimos a la altura y nos pudimos adaptar rápidamente y dar respuesta en cuanto a lo digital, también nos hizo pensar que hay que apuntar a esa modalidad.

Por eso, estamos avanzando en nuestros sistemas, en cómo brindamos el servicio. A su vez, incorporamos mucha tecnología para ofrecer los resultados en el menor tiempo posible. Hoy estamos dando respuesta en menos de 24 horas y esto se da así porque realizamos mucha inversión con equipos acorde.

De cara al año que viene, tenemos proyectos de inaugurar nuevas sedes. Queremos concretar este anhelo. La idea siempre es seguir acercándonos a las personas. Buscamos lugares estratégicos para poder acercarnos y mejorar la conectividad. Siempre apuntamos al progreso del servicio y al continuo crecimiento.

¿Qué aprendieron como empresa de la pandemia?
Desde nuestra génesis apostamos a la inversión en tecnología para este servicio, sobre todo para la calidad analítica y la mejora de los procesos. Actualmente, la pandemia nos hizo apuntar a otra tecnología, la cual está referida para brindar un servicio sin contacto humano. Incorporar sistemas para atender al público sin necesidad de trasladarse al laboratorio.

En algún momento, por supuesto que hay un cierto contacto por las muestras biológicas que se toman, pero la pandemia nos permitió mejorar muchísimo y acelerar la metodología online –con todo lo que ello representa-. Este año incorporamos atención telefónica, dos números de WhatsApp para segmentar las distintas necesidades, abrimos redes sociales para estar más cerca de la gente, y lanzamos una nueva plataforma web, la cual es más funcional y amigable. La verdad es que tenemos muchos proyectos para el año que viene en materia de tecnología.

Fuente: La Capital