(Washington).- La transfusión de sangre y componentes seguros es un acto que salva vidas. Sin embargo, existe un riesgo asociado tanto para los donantes de sangre y componentes, como para los pacientes que son transfundidos. Tener implementado un sistema de hemovigilancia es esencial para identificar y prevenir la aparición o reaparición de las reacciones adversas y los eventos no deseados, así mismo, para aumentar la seguridad, la eficacia y la eficiencia de la transfusión de sangre.

Este sistema debe abarcar todas las actividades de la cadena de la sangre (de vena a vena), es un seguimiento bidireccional del donante al receptor y viceversa. No es un proceso estático, sino un continuo de recolección y análisis de datos relacionados con los procesos de la transfusión, los eventos adversos y reacciones transfusionales.

El sistema de hemovigilancia es una parte integral del sistema de gestión de calidad y es necesario para la mejora continua de la misma y la seguridad de la sangre y componentes.

Hemovigilancia en la Región de las Américas

Una de las líneas estratégicas prioritarias del Plan Regional de Acceso Universal a Sangre Segura 2014-2019, aprobado por los Ministros de Salud de la Región de las Américas en el 53 Consejo Directivo de la Organización Panamericana de la Salud/Organización Mundial de la Salud en octubre del 2014; tiene como uno de los objetivos principales el fortalecimiento de los sistemas nacionales de sangre de tal manera que permita la implantación de la hemovigilancia en los servicios de sangre.

Los países de Latinoamérica y Caribe han hecho esfuerzos aislados para avanzar en el campo de la hemovigilancia.  Sin embargo, hasta ahora, pocos países en la Región han implantado sistemas nacionales de hemovigilancia. Es importante que los ministerios de salud ejerzan un efectivo liderazgo y gobernanza para asegurar el funcionamiento del sistema nacional de hemovigilancia. Se necesita la elaboración e implantación de políticas, planes nacionales y marcos regulatorios donde se incluya  el alcance y los diferentes elementos que integran la vigilancia sistemática y exhaustiva de la cadena transfusional.

Guía para establecer un sistema nacional de hemovigilancia

El principal propósito de la guía consiste en prestar ayuda a los países para que establezcan sistemas nacionales de hemovigilancia eficaces a lo largo de toda la cadena transfusional. A su vez, este manual tiene como objetivo ofrecer orientación para la elaboración de políticas que apoyen el establecimiento de este  sistema como parte de los sistemas nacionales de salud; y aportar información y orientación técnica sobre las medidas y las actividades específicas necesarias.

Dada la importancia de la seguridad sanguínea para la salud pública, este manual contribuirá y facilitará tanto la comprensión, como la implantación de los procesos necesarios para el desarrollo de los sistemas nacionales de hemovigilancia en los países de las Américas.

Lea la Guía para establecer un sistema nacional de hemovigilancia. Washington, DC: 2017. ISBN 978-92-75-31946-8

Fuente: OPS